Se entenderá por Hogar Protegido una instancia residencial alternativa, para personas con discapacidad de causa psíquica que no tienen las habilidades para vivir en forma independiente y no cuentan con el apoyo de sus familias.
Estos hogares deben garantizar una dinámica de funcionamiento que tienda a asemejarse lo más posible a las relaciones que se establecen en cualquier grupo humano de adultos que habitan una residencia común, es decir, fomentar la participación (promoviendo la expresión de afectos, ideas y opiniones), el respeto, la tolerancia y las relaciones afectivas.
El objetivo de un Hogar Protegido es integrar las necesidades habitacionales con las necesidades de apoyo y seguridad que requieren las personas con discapacidad psíquica, contribuyendo además al proceso de entrenamiento de las habilidades que se relacionan con su desempeño en el hogar. De este modo, el Hogar Protegido debe tender a favorecer su autonomía. De acuerdo a lo anterior, cuentan con personal de cuidado en jornada parcial.
Al igual que una Residencia Protegida, cuenta con apoyo del equipo técnico y apoyo espiritual a través de la Pastoral de Salud.
Servicios Residenciales
Los principales servicios residenciales son:
– Alimentación
– Vestuario
– Higiene
– Administración de medicamentos
– Acompañamiento a salidas médicas
– Aplicación de tratamientos específicos
– Acompañamiento dentro y fuera de residencia.